Tan difícil se nos hacia pensar en la vida fuera de nuestro planeta que cada vez que salimos de expedición un poquito más allá encontramos charcas para ir de vacaciones en los años venideros.
Esta vez le ha tocado el turno a Encélado una diminuta luna de Saturno, que gracias a las imágenes tomadas por la sonda cassini se pudo apreciar como esta lanzaba columnas de hielo a grandes distancias de su superficie con un proceso similar al de los géiseres de la tierra. De esta manera se añade al club vip de lugares del sistema solar que presentan algún tipo de actividad volcánica entre los que estaban la luna Ío de jupiter, la luna Triton de Neptuno y la Tierra. Considerado unos de los mayores candidatos a albergar vida aunque sea en forma de organismos primitivos o microbios capaces de sobrevivir en condiciones extremas. Ampliando así la diversidad de ambientes del Sistema Solar en los cuales pueden desarrollarse organismos vivientes.
Ya se habían encontrado indicios en otros planetas de la existencia de agua, como en Marte pudieron detectar las sondas Spirit y Oportunity a través de erosiones en las rocas y otras exámenes científicos, pero no se había visto tan claramente como en Enceladus en la que se cree que los depósitos de agua están a pocos metros de la superficie.
Enceladus tiene un polo Sur inusualmente cálido, su temperatura ronda los -183 grados centígrados, temperatura que puede parecernos relativamente baja, pero debemos tener en cuenta su distancia al Sol.
Otras de las características a destacar de Encélado es que es el objeto más brillante del sistema solar y que posee una tenue atmósfera.
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